domingo, 26 de septiembre de 2010

El Terrorismo, la Humillación y los Desafíos para el Sistema Internacional. Por: Alejandro Delgado Vásquez

Trabajo académico presentado en la Maestría de Análisis de Problemas, Políticos, Económicos Internacionales Contemporáneos. Academia Diplomática / Universidad Externado

Por: Alejandro Delgado Vásquez.

Introducción
El terrorismo ha sido utilizado con fines políticos y económicos desde hace mucho tiempo. Existen recuentos históricos que hablan que desde los tiempos de Roma los Sicarii judíos defendían sus tierras de los romanos usando técnicas no convencionales para generar miedo entre sus invasores. Igualmente en el siglo XI, la secta de los Asesinos, una rama de los Ismaelitas, se dispersaron por Siria asesinando prefectos, califas y hasta el Rey Cruzado de Jerusalén con el objetivo de generar pánico y vencer (Laqueur, p. 39).
Actualmente el terrorismo como estrategia de guerra es funcional porque genera un sentimiento de pánico entre las personas que sobreviven al atentado, los cuales a su vez presionan para que se tomen las decisiones solicitadas por los que perpetran dicho acto. Es también una estrategia muy eficiente, ya que causa gran daño y pánico a un costo muy bajo, aparte que los estándares de guerra “decente” no lo cobijan.
Por otra parte, el sentimiento de humillación ha sido estudiado en años recientes y se ha definido como una posible causa del terrorismo, especialmente en el mundo Árabe-Islámico.  Pero, ¿se podría afirmar que es ésta emoción la causa del terrorismo del siglo XXI?, ¿Qué implicaciones o desafíos genera este fenómeno para el sistema internacional?  
Para responder a estas inquietudes se comenzará por discutir sobre la relación entre los sentimientos de humillación y el surgimiento de los derechos humanos, segundo se tratará el tema de cómo los promotores de los valores democráticos y los derechos humanos violan lo que pregonan generando más sentimientos de humillación, más adelante se discutirá sobre como la humillación es posiblemente una fuente del terrorismo del siglo XXI, y para finalizar se tratarán los desafíos para el sistema internacional que genera el terrorismo del siglo XXI.

IA- Humillación y Derechos Humanos
Se debe tener en cuenta que la humillación es un fenómeno relativamente nuevo, el cual surge como consecuencia emocional de la idea de que todos los seres humanos, independientemente de las diferencias que existan, nacen con los mismos derechos y con igual dignidad. Anteriormente, era aceptado un orden natural, donde los privilegiados podían tomar acciones muy fuertes y hasta abusar de sus súbditos, sin que ellos sintieran humillación (Fernandez Arregui, 2008). Por primera vez, hace unos 250 años, gracias a la Revolución Francesa y la Declaración Americana de Independencia, el poner debajo o degradar a otro ser humano se denominaba como injusto ya que violaba un derecho fundamental (Fernandez Arregui, 2008). Comienza en ese momento un cambio sustancial en la moral y la política occidentales, el cual culmina con la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948, con lo que pierde validez moral la escala vertical del valor humano que reinaba hasta ese momento. Este cambio causa que el sentimiento de la humillación comience a tener más fuerza entre los pueblos que se sienten dejados atrás o que ven que su situación es inferior a los pueblos privilegiados

IB- Países que pregonan la ampliación de los derechos humanos y la democracia, los violan constantemente, aunando los sentimientos de humillación.
Estados Unidos es el mejor ejemplo de dicha afirmación. Las acciones bélicas preventivas ilegales, en nombre de la democracia y los derechos humanos han logrado que dicho país sea visto como una gran amenaza humillante, más que una potencia que es ejemplo, especialmente en la región Árabe-Islámica.  Se debe tener en cuenta que en dicha región hay un alto crecimiento demográfico, al igual que un crecimiento en el sentimiento de humillación percibido, debido a la caída del Imperio Otomán, el proceso de colonización, y finalmente el establecimiento del Estado de Israel. Moïsi nos afirma que el momento clave para el aumento del sentimiento de humillación en dicha región es cuando se pierde por completo el sentimiento de esperanza después de la Guerra de los Seis Días (Moïsi, Ubicación 1146-1147).
Por otra parte, se encuentran casos como los de Abu Ghraib, el asesinato continuo de civiles en Afganistán e Irak, el tratamiento ambiguo de Estados Unidos a las violaciones de Israel y la base de Guantánamo, entre otros, los cuales según Mark Weisbrot del Center for Economic and Policy Research, son una clara muestra de que este país está perdiendo credibilidad gracias a sus estándares de doble moral y uso de la teoría de Carl Schmitt, al diferenciar claramente entre amigo y enemigo, con los respectivos estándares éticos utilizados, de acuerdo a los objetivos políticos y económicos que se tengan en un momento específico (Weisbrot, 2009). Éstas actuaciones ambiguas generan mayores sentimientos de humillación que a su vez aumentan la probabilidad de que sucedan más actos terroristas.

IIA- La Humillación Como Fuente del Terrorismo del Siglo XXI
Dominique Moïsi define la humillación como una emoción en la que se siente que se ha perdido el control de la vida misma, tanto de forma colectiva, como en la nación, como en el individuo ó en la comunidad religiosa. Esta se exterioriza cuando se percibe que el “otro” se ha inmiscuido en la esfera privada de la vida de uno, para convertirlo en una persona completamente dependiente de el (Moïsi, Ubicación 1027, 1030). Moïsi además afirma que la cultura de la humillación está ejemplificada en el mundo Árabe-Islámico, donde significa “impotencia, el estar destinado a un futuro que contrasta con el pasado glorioso.” (Moïsi, Ubicación 1032, 1035). Este sentimiento puede llevar hacia dos tipos de comportamiento: uno en el que la humillación genera sentimientos de “les probaré que sí soy capaz, les demostraré lo equivocado que estaban al no tenerme en cuenta”, tal como en el Sudeste Asiático, donde la humillación se convirtió en una poderosa herramienta para generar competencia y ganas de mejorar, lo que llevó hacia un gran avance social y económico. La otra cara de la moneda, tal como lo menciona Moïsi, se convierte en “si no puedo alcanzar su nivel, los arrastraré hacia el fondo, voy a demostrarles lo que es el sufrimiento.” (Moïsi, Ubicación 1032, 1035).
En cuanto al terrorismo, su definición todavía no es muy clara y se cuenta con muchos puntos de vista, dependiendo del objetivo político o económico que tenga quien lo define o quien sea su legitimador. Para aclarar este punto, el diplomático libanés Sami Zeidan da el ejemplo de Bin Laden, el cual fue llamado “Freedom Fighter” cuando peleaba contra los Soviéticos en Afganistán, apoyado por la CIA, y ahora está como número uno en la lista de los más buscados terroristas (Zeidan, 2006). Las Naciones Unidas ha tratado de llegar a una Convención en Terrorismo Internacional, pero no ha llegado a un consenso. La definición usada en este ensayo es la que hasta ahora ha utilizado las Naciones Unidas, de acuerdo a la Resolución 49/60 del 9 de diciembre de 1994 - Medidas para Eliminar el Terrorismo Internacional: la cual lo define como “actos criminales intencionales o calculados, que tienen el fin de provocar un estado de terror en la  población, en un grupo de personas o una persona en particular con propósitos políticos. Ningún tipo de estos actos es justificable por consideraciones políticas, filosóficas, ideológicas, raciales, étnicas o religiosas.”
Como se definió en la sección anterior, las ambigüedades y dobles morales demostradas por los países que deberían ser ejemplo, logran que los sentimientos de humillación sean potenciados, especialmente en los países Árabe-Islámicos, en cuya cultura prima la comunidad sobre el individualismo. De esta manera se generan sentimientos de afecto y solidaridad con los vecinos que están sufriendo, lo que tiende a llevar a dichas personas a demostrar su poder para defenderse de maneras no convencionales tales como el terrorismo. Es más, algunos analistas afirman que las acciones terroristas han aumentado desde los actos violentos llevados por Estados Unidos, después del 11 de septiembre del 2001 (Marton, 2005).  Adicionalmente, la profesora de la Universidad de Oslo, Evelin Lindner, da un ejemplo muy claro, cuando se refiere a sus visitas a Ruanda y lo que le decían los habitantes de dicha zona del mundo. El mensaje que le dieron fue el siguiente: “Primero nos colonizan, luego nos dejan con un régimen mal llamado democrático el cual es completamente ajeno a nuestra realidad, luego ven como nos manejan brutalmente regímenes dictatoriales a los que les regalan armas para que maten a la mitad de todos nosotros, y finalmente vienen aquí a medir nuestro sufrimiento con sus científicos sociales” (Lindner, 2001).

IIB- Desafíos para el Sistema Internacional
La visión pesimista de Moïsi sobre el mundo en 2025 genera una manera sencilla de entender lo que hoy son los desafíos para el Sistema Internacional. El uso del terrorismo para combatir el terrorismo es uno de ellos, ya que aumenta la humillación, la cual a su vez acrecienta el terrorismo. Los países poderosos deben ser los que lideren la salida del sentimiento de humillación por parte de los países Árabe-Islámicos, con lo que podrían reducir las posibilidades de uso del terrorismo como herramienta de guerra. Una posición clara y concisa de parte de las potencias sobre la situación en Israel y en Palestina, ayudaría a evitar el avance de la humillación en los países Árabe-Islámicos. Las conversaciones que en este momento se están gestando, con ayuda del Gobierno de Obama, son una buena señal, pero se necesita objetividad para con Israel, ya que este tiende a no respetar los Derechos Humanos, aumentando los sentimientos en su contra. Lo difícil es que el lobby judío es muy poderoso e influyente, pero existe esperanza. Adicionalmente, lograr la difícil tarea de definir al terrorismo con una visión objetiva es también un gran desafío, considerando que los países poderosos actualmente lo hacen de acuerdo a sus objetivos individuales y a sus agendas internacionales. Es por esto que se sigue perdiendo la credibilidad de dichas potencias, las cuales terminan simplemente atacando un síntoma, en vez de la enfermedad en el momento que usan la fuerza, generalmente afectando a la población civil.

Conclusiones
Se podría decir que el sentimiento de humillación tuvo su empuje claro a partir del avance en el conocimiento y puesta en práctica de los Derechos Humanos. Dicho cambio en la estructura vertical en las relaciones sociales logra que aquellos pueblos que actualmente se sienten dejados atrás y olvidados, cuando en el pasado fueron grandes potencias, se sientan humillados. Adicionalmente, si los países poderosos no cumplen lo que predican, en cuanto a la protección de dichos derechos humanos y el avance de la democracia, sólo lograrán aumentar el sentimiento de humillación en aquellos países que actualmente lo padecen. Tercero, el sentimiento de humillación genera una alta posibilidad, sin decir que siempre sucede, de que se cometan actos terroristas. Esto debido a que las personas que se sienten dejadas atrás, vulneradas o apabulladas, sólo tienen una estrategia para defenderse que genere pánico a bajo costo: El terrorismo.
Los súper poderes modernos deberían tomar acciones humanitarias, al igual que cooperativas que conduzcan a una cesación de la humillación. Para comenzar, estos súper poderes deberían tomar las mismas acciones, ojalá no violentas, basados en una misma regla que aplique tanto para sus países aliados, como los que no son aliados. Segundo, dichos países no deberían usar la excusa del terrorismo para perpetrar actos terroristas, tales como invasiones militares, secuestros, golpes de Estado, bombardeos y demás (Marton, 2005). Además, es importante que la definición de terrorismo no esté permeada por las agendas individuales de los países poderosos. Ademas estas potencias deben demostrar que practican lo que predican, con el fin de que sigan siendo los líderes en el desarrollo y avance de la democracia y el respeto por los derechos humanos, evitando ser vistos como unos prepotentes que usan la doble moral, simplemente para su propio beneficio.

Bibliografía 

Fernandez Arregui, S. (2008). Reflexiones sobre el significado social de la humillación. Sicología Política , 29-46.
Laqueur, W. (2003). Una historia del Terrorismo. Barcelona: Paidós Ibérica.
Lindner, E. (2001). Humilliation as a Source of Terrorism. Peace Research , 33-68.
Marton, M. (2005). Terrorism and Humiliation. Beyond Humiliation: Encouraging Human Dignity in the Lives and Work of All People (pp. 1-6). Berlin: Humiliation Studies.
Moïsi, D. (2009). The Geopolitics of Emotion: How cultures of Fear, Humiliation, and Hope are Reshaping the World. Kindle Edition. Nueva York: Doubleday.
Weisbrot, M. (2009, Marzo 11). Washington's Lost Credibility on Human Rights. Bajado Septiembre 14, 2010, from Center for Economic and Policy Research: http://www.cepr.net/index.php/op-eds-&-columns/op-eds-&-columns/washingtons-lost-credibility-on-human-rights/
Zeidan, S. (2006). Desperately Seeking Definition: The International Community´s Quest for Identifying the Specter of Terrorism. Cornell International Law Journal , 491-492.

lunes, 2 de agosto de 2010

Businesses and Ethics... Do they really combine? By: Alejandro Delgado Vásquez

Businesses and Ethics
We live in a world that is not infinite and things are scarce. Everyone must make an effort to live and there is constant competition for the resources needed. On the other hand, there is the utopical story of Adam and Eve´s Paradise, a place were most of the people would like to go, but if things were infinite, there would not be any need for economics, no need for businesses, no need for greed or selfishness, no use for Maslow´s pyramid, and the power of individuality would not exist. But, since we live in a world where individual effort is embraced, and conflict is the only thing that is constant, we must create some rules for ethical behavior that prevent us from killing each other. Taking a realist point of view, where individuals are selfish and greedy by nature, we can say that capitalism itself should not be placed in an unethical-ethical scale, because it is just an economic model that copies nature. What is unethical or ethical is the behavior of humans managing that model.

Businesses must respond to many different interests groups, such as people, community, governments, shareholders, stakeholders, etc. They must provide good quality, well paid, decent jobs, and make good and reliable products. They must not pollute the air or the water; they must not make toys with lead paint. But they must also make a profit. This simple fact makes businesses act in the same way as individuals, so ethical rules try to promote the survival of capitalism, because it takes care of the buyers or consumers (that otherwise would not make it alive) that it needs to survive.

As in International Relations, anarchy best describes the actual globalized business world. There is the World Trade Organization and many other entities that try to regulate trade and such, but they do not have the power to really impose any sanctions that have a true effect. No entity is capable of avoiding conflict. So basically, war is the only option between corporations, and zero-sum (I win, you lose) is the rule. Ethical rules try to appease this.

The most recent case of unethical behavior that placed capitalism in danger is the financial crisis of 2008. As Paul Krugman states in his book, The Return of Depression Economics and the Crisis of 2008, moral risk taken by the financial companies, leaded by their greedy CEO´s, caused a great strain on the financial world. The individual CEO´s wanting to show their boards of directors short-term results and share value increases, incurred in very unethical behavior by granting loans to NINJAS (people with no income, no job, no assets), which in turn created a bubble in the housing market. When these ninjas were not able to pay their loans back, and their debt was bigger than the real value of their assets, a huge crisis was on the way. These companies took the moral risk, because they knew that the central government would not let them go bankrupt.

Another example can be depicted by the recent events in the Gulf of Mexico and the huge oil spill that will have tremendous environmental effects in years to come. Greed and unethical behavior by individuals that corrupted the government to allow deep-ocean drilling created a high risk, high profit situation for BP and for government officials that wanted to show good profits and results (Eilperin, 2010). The funny thing is that individuals that manage capitalism are willing and able to socialize loses, but not profits.

In a more familiar case for us here in Colombia, we can all say that a Free Trade Agreement with the United States is a good idea in pure capitalist terms, because it would give us access to the biggest economy in the world. But, since our natural potential is in agriculture, and the United States subsidizes its farmers, we can argue that such an agreement is not ethical because it creates a zero-sum relation. But it is not capitalism that is unethical; it is the government leaders, obviously trying to protect its nationals, which act unethically.

In recent months, the World Economic Forum stated that one of the most important goals of the business world in order to guarantee the survival of capitalism is to shape the values and principles of business leaders (Turley 2009). This means the creation of an Economic Council in the United Nations, based on the Security Council, which would regulate the individual behavior of the people that manage capitalism. It also seeks to promote accountability by the corporations for executives´ unethical behavior, and the push for the use of long-term results instead of short-term results for bonus assignments.

In conclusion we can say that businesses have a tremendous responsibility to maintain order in an otherwise anarchic world, but individual selfish behavior creates a danger for capitalism, because it only thinks in short-term profits. Capitalism is a good economical model, because it promotes creativity, innovation, and self-fulfillment. But if ethical, win-win models are not promoted, the expectations of human survival are very limited.


Bibliography



Eilperin, Juliet. "Environmental News." The Washington Post. May 5, 2010. http://www.washingtonpost.com/wp-dyn/content/article/2010/05/04/AR2010050404118.html (accessed June 16, 2010).
Turley, Jim. "Publications." Ernst and Young. 2009. http://www.ey.com/Publication/vwLUAssets/World_economic_forum_davos_2009/$FILE/World_economic_forum_davos_2009.pdf (accessed June 16, 2010).

jueves, 22 de julio de 2010

Two Souls

If having two languages means one has two souls... I would like to know which one I still own and which one has been already sold. I hope I am able to find out through this journey, or reconcile both in a happy medium so the three of us can be happily ever after...


Per my editor's request, my collaboration with this blog will be in English. I am not sure how I feel about that, since English is not my mother tongue. I hope to amuse the readers with my writings and whatever my soul (or this one) decides to express through this Blog.


I thought Alejandro had a great idea to create this space online for expression and good readership. I hope more people decide to add to it and share in with ideas. We must gather together and make good use of this space. It is evident for our times that being online and linked through the Internet is a must. Things have shifted so rapidly that even on my premature 30's, I've witnessed several booms (or explosions) of modern technologies and changes. Besides technology becoming the ruler of our existence, a lot has changed in terms of information, communications, human relations and our own humanity. I hope this has helped us all agree on how appalling our own kind can be, and how we can create community to do something to change it for good.


It is hard to believe that 10 years ago I would still write letters and mail them to those dear to my heart, and now, my writing as mostly been reduced to online outlets. I rarely mail letters anymore, except for greeting cards and thank you notes, which are vital to me and to my relationships. They are warm and personal touches that cannot become extinct. Whoever denies the pleasure of receiving one, is not of the human kind, or perhaps is a highly evolved (Really?) individual. I am not sure.


I do like to write, and I will indulge in this pleasure from now on, whenever it be.


Hasta pronto,


See you soon


AM

miércoles, 21 de julio de 2010

La política exterior (petrolera) estadounidense. Reseña por: Alejandro Delgado Vásquez

Cómo la demanda de petróleo determina la política exterior estadounidense. Por: Soeren Kern


Soeren Kern, estadounidense y alemán, es Analista Principal de Relaciones Transatlánticas en el Grupo de Estudios Estratégicos. Desempeñó el mismo cargo en el Real Instituto Elcano de Estudios Internacionales y Estratégicos. Fue miembro de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos en Alemania durante la Guerra Fría. Ha viajado a más de 100 países por Europa, América Latina y el Medio Oriente. Es licenciado en diplomacia y seguridad internacional de la Universidad de Georgetown, y en política internacional de la Universidad Hebrea de Jerusalén. (Diario de América 2008)
En este interesante artículo, el autor describe de forma clara cuál ha sido, es, y será el talón de Aquiles de los Estados Unidos para lograr la hegemonía mundial que busca: Su dependencia energética del petróleo extranjero, especialmente de países que no son aliados fieles de dicho país.
Tal como lo recuerda el autor, Estados Unidos tiene menos del 5% de la población mundial y consume el 25% del petróleo mundial, lo que lo convierte en el mayor consumidor, al igual que el mayor contaminante del planeta. Actualmente el 60% de ese petróleo proviene del extranjero y se espera que para el 2025 sea el 70%. (Kern 2006) Adicionalmente, Estados Unidos cuenta con gran cantidad de vehículos automotores, los cuales consumen alrededor del 60% de la energía de ese país.
De manera muy sensata, el autor comenta sobre la labor de Estados Unidos en el mantenimiento del balance de poder entre los países de Oriente Próximo para evitar que las fuentes petroleras que salen por el Estrecho de Ormuz caigan en manos de radicales Islámicos, por lo que Irán, y su supuesto programa nuclear se convierte en un gran bache en el camino, ya que podría dañar el balance de poder que hay en la zona.
El autor hace un recuento de las diferentes políticas exteriores que ha definido Estados Unidos durante la historia reciente con respecto al petróleo, donde siempre se ha buscado controlar las fuentes del petróleo, por ejemplo cuando Roosevelt en 1945 prometió al rey de Arabia Saudita que protegería su reino a cambio de acceso privilegiado a las fuentes de petróleo (Kern 2006). De igual manera, EEUU siempre ha buscado la independencia energética del Oriente Próximo, pero no la ha conseguido, es más, se espera que aumente su dependencia de dicha región en el futuro próximo.  Adicionalmente Kern habla de las políticas de protección y mantenimiento de las fuentes confiables de energía en África, América Latina y demás zonas productoras. (Kern 2006)
Desde que el Reino Unido dejó de proteger sus intereses en Medio Oriente, Estados Unidos tuvo que tomar como política de seguridad nacional el mantener personal militar para proteger sus intereses en la región de Oriente Próximo, lo que le ha costado enormes cantidades de dinero, pero aún estos costos no superan los costos de no tener la energía que su inmensa economía requiere para mantenerse andando.
El reto de Estados Unidos es seguir manteniendo una economía sedienta de energía que no tiene origen en su propio territorio, cuando países como China e India están aumentando su consumo y llegarán a competir por las mismas fuentes energéticas, generando desbalances de poder. Igualmente Rusia, quien es el mayor proveedor de energía de Europa, está usando su poder energético con fines políticos, para así presionar a sus antiguos Estados satélites.
Adicionalmente, está el factor iraní, ya que si ellos consiguen obtener la bomba nuclear podrían desestabilizar la zona de Medio Oriente, generándole gran cantidad de problemas a Estados Unidos, quien se ve en la encrucijada de atacar a Irán militarmente, sabiendo que si lo hace, los precios del petróleo subirán rápidamente, lo que finalmente afectará su economía de forma drástica.
El autor de forma audaz pone sobre la mesa los ingredientes para que el lector saque sus propias conclusiones y haga sus respectivos análisis geopolíticos sobre el futuro del poder de Estados Unidos, teniendo en cuenta su dependencia energética de fuentes extranjeras, al igual que muestra de forma clara que la política exterior estadounidense se basa claramente en mantener esas fuentes de energía lo más cercanas y amigables posibles, sin tener en cuenta las acciones o los “amigos” que se consigan para obtenerlas.

Bibliografía


Diario de América. «Biografía corta de Soeren Kern.» Diario de América. Enero de 2008. http://www.diariodeamerica.com/front_notas_list.php?id_autor=213 (último acceso: 22 de Marzo de 2010).
Kern, Soeren. «¿Cómo la demanda de petróleo determina la política exterior estadounidense.» Pundicity. 23 de Junio de 2006. http://kern.pundicity.com/5479/demanda-de-petroleo-determina-politica-exterior-estadounidense (último acceso: 14 de Marzo de 2010).




La justicia. Reseña por: Alejandro Delgado Vásquez

Critón o del deber. Por Platón

En el libro de Fernando Savater titulado, Historia de la Filosofía, sin temblor y sin temor, el autor habla de forma muy sencilla sobre Aristoclés, o Platón, quien es el autor del diálogo que se estudiará a continuación.
Savater describe a Platón como un fiel seguidor de Sócrates. Sócrates era un filósofo ateniense al cual le gustaba hacer preguntas a la gente para discutir con ellos las respuestas. A él se le podía encontrar en la plaza pública cuestionando a cualquiera que se dejara cuestionar, con el fin de recordar una antigua recomendación del oráculo Delfos que decía “Conócete a ti mismo.”  (Savater, pág. 25).
Platón es descrito como un personaje corpulento y de buena familia que conoció a Sócrates cuando tenía alrededor de 18 años y quedó encantado de él. Siempre trató de seguirlo a donde fuera para escucharlo y aprender de sus enseñanzas. Después de la ejecución de Sócrates él se puso en la tarea de escribir sobre las enseñanzas de su maestro (ya que este no había dejado nada escrito), para impedir que Sócrates cayera en el olvido y para demostrar que su condena fue injusta (Savater, pág. 42). Teniendo en cuenta que Sócrates dialogaba en vez de dar discursos, Platón pensó que la mejor forma de mantener viva la enseñanza de Sócrates era a través de la escritura de diálogos (Savater, pág. 43).
Con el fin de contextualizar a Platón y definir el pensamiento de su época se debe comprender que Atenas en el siglo cuarto antes de Cristo tenía un gobierno diferente a los demás: se llamaba democracia, y los ciudadanos (las mujeres y los esclavos no eran ciudadanos con pleno derecho), decidían en la plaza pública el destino de su ciudad mediante el voto.
Los atenienses amaban el arte, los espectáculos deportivos y la literatura. Les gustaba escuchar sobre las historias de guerra y las hazañas de los héroes (Savater, pág. 22). El teatro mezclaba personajes humanos con dioses de la mitología, donde se explicaban los orígenes del mundo y las costumbres humanas.
 Adicionalmente los griegos se dedicaban a la generación del conocimiento basado en la observación de la realidad. Querían saber de qué está hecho el mundo, qué son las estrellas y cómo funciona la naturaleza. Querían pruebas, demostraciones, razonamientos. Querían calcular y apreciaban la razón. Preferían teorías para explicar lo real por medio de causas tomadas de la realidad (Savater, pág. 25).
Algo muy importante para los griegos era la discusión entre iguales, el debate abierto con otras personas mediante argumentos, o sea, el uso de la razón. Ellos estaban convencidos que el conocimiento era aumentado con la discusión (Savater, pág. 24).
Critón o del deber es uno de los más famosos diálogos de Platón. En éste el plantea la importancia del deber del ciudadano ante el Estado y ante las situaciones justas e injustas de la vida. Este diálogo se desarrolla dentro de la celda de Sócrates en prisión, a donde llega Critón con la intención de convencer a Sócrates de huir de tal lugar y salvar su vida (Platón, p. 30).
El objetivo del diálogo de Critón o del deber es hacer reflexionar al lector si el deber y obligación del ciudadano es someterse a las leyes del estado sin objeción alguna, aunque se haya cometido una injusticia y pueda perderse la vida.
Critón pretende que Sócrates escape de prisión y huya de Atenas yéndose a una ciudad en el extranjero, pero da argumentos que no convencen a Sócrates, pues él no es como cualquier criminal; él es un ser moral que sabe perfectamente que su deber es quedarse ahí y someterse a las leyes, aunque haya considerado que su juicio fue injusto y no merezca la muerte.
Critón da mucha importancia a lo que pudiera pensar la gente si Sócrates muere. El piensa que lo juzgarán por no haberlo ayudado a pesar de que tiene una fortuna y le dice a Sócrates que entienda su situación.  
Pero Platón plasma su forma de pensar en dicho diálogo, especialmente en lo relacionado con la democracia, cuando pone en boca de Sócrates la siguiente frase: “¿Debemos  hacer tanto aprecio de la opinión del pueblo? ¿No basta que las personas más racionales, las únicas que debemos tener en cuenta, sepan de qué manera han pasado las cosas?” (Platón, pág. 28).
De esta forma Sócrates pretende hacerle entender a Critón que no hay que hacer tanto caso de lo que dice el pueblo, ya que aunque hay personas que sí merecen respeto y atención por su inteligencia y conocimiento de lo justo, la gran mayoría de la gente no merece ningún respeto pues no tiene idea de que es lo justo y lo injusto, a pesar de que tienen poder de decisión. Haciendo de esta forma Platón, el autor de éste diálogo, una crítica a la democracia ateniense.
En la segunda parte del texto, Sócrates utiliza su conocido método de la mayéutica (debate) para hacerle entender a Critón qué es lo justo y lo injusto, y si es o no justo que el huya de la prisión: “en el momento de la huida o, si te agrada más, de nuestra salida, si la ley y la República misma se presentasen delante de nosotros y nos dijesen: ‘Sócrates, ¿Qué vas a hacer? ¿La acción que preparas no tiende a trastornar, en cuanto de ti depende, a nosotros y al Estado entero?’ ¿Qué podríamos responder, Critón, a este cargo y otros semejantes que se nos podrían dirigir? Porque ¿qué no diría, especialmente un orador, sobre esta infracción a la ley, que ordena que los fallos dados sean cumplidos y ejecutados? ¿Responderemos nosotros que la República nos ha hecho injusticia y que no ha juzgado bien?” Ante estos cuestionamientos Critón responde que sin duda eso dirían, pero Sócrates le responde “¡Qué! – dirá la ley ateniense -, ¿Sócrates, no habíamos convenido que tu te someterías al juicio de la República? […] ¿no soy a la que debes la vida? […] Exactamente, diría yo.”
De esta forma Sócrates da a entender que no se debe escapar del juicio de la ley cuando se ha aceptado de antemano que se pertenece y se cree en el Estado y su gobierno. Además, explica que si escapara, todas sus doctrinas, filosofía y conocimiento, las cuales se había dedicado a divulgar por toda Atenas, se las hubiera llevado el viento.
De esta forma, al final Critón termina dándole la razón a Sócrates, aceptando su triste destino.


Bibliografía


Platón. (1984). Diálogos II. Bogotá: Ediciones Universales.
Savater, F. (2009). Historia de la Filosofía, sin temblor y sin temor. Bogotá: Editorial Planeta Colombiana S.A.



La moda como arma para apaciguar los deseos revolucionarios. Reseña por: Alejandro Delgado Vásquez

Gilles Lipovetsky: El imperio de lo efímero: la moda y su destino en las sociedades modernas

Gilles Lipovetsky es un filósofo francés que trabaja como profesor de filosofía en la Universidad de Grenoble. En 1983 publicó su obra principal, La era del vacío. En su segundo trabajo, El imperio de lo efímero: La moda y su destino en las sociedades modernas, publicado en 1987, Lipovetsky lleva a cabo un amplio estudio sobre la moda, en el que intenta explicar la influencia de los cambios en los gustos de la moda en el sentido de la tolerancia y el relativismo en los valores, factores dominantes del individualismo del presente. (Biografías y Vida 2004).
El libro de Lipovetsky comienza por un estudio histórico de la moda desde las épocas de la monarquía, donde la moda era exclusiva para las personas allegadas al rey, hasta finales de los años 80 en el siglo XX, donde se logra masificar todo lo relacionado con la búsqueda frenética de lo nuevo en todos los medios y hacia una mayoría individualista.
Su escritura se basa en un entorno donde comienza el proceso moderno y tecnológico de globalización cultural, donde no se tenía acceso a Internet de forma masiva, pero ya se vislumbraba una gran internacionalización de los conceptos de moda, de la creación de productos con un ciclo de vida reducido, de la búsqueda de la satisfacción individual, y del triunfo de la “seducción.” (Lipovetsky, 268).
En la primera, de dos partes del libro, se argumenta que las sociedades hiperconservadoras “prohíben la aparición de la moda porque ésta es inseparable de una relativa descalificación del pasado: no hay moda sin prestigio y superioridad atribuidos a los nuevos modelos y, por tanto, sin cierto menosprecio por el orden antiguo.” (Lipovetsky, 27). Se habla de que a la moda solamente tenían acceso los nobles, hasta el siglo XIII y XIV, cuando aparecieron los burgueses. El acceso a grandes riquezas de personas fuera de la nobleza, y el afán de estas mismas por diferenciarse del resto, hizo que el acceso a la moda se aumentara, penetrando en la pequeña burguesía.  (Lipovetsky, 43) 
Lipovetsky asocia la libertad con la moda, ya que la posibilidad de satisfacer los deseos y soltarse de las prohibiciones morales contribuye a apaciguar las búsquedas reformistas y revolucionarias de la población, con lo que se puede mantener a raya. Especialmente si se usa la diversión y lo efímero para calmar las ansias de cambio. Por ende la moda funciona como una herramienta de la “revolución democrática.” (Lipovetsky, 99).
En cuanto a la política, Lipovetsky muestra de forma real y puesta en la tierra, como la banalidad, el facilismo, y el individualismo han contribuido a que la política, como piedra angular de una sociedad, pierda su importancia, al ser mas importante el vestido que lleva tal político, la casa donde vive este otro, el que un ministro se quedó dormido, el que un presidente se case con una modelo, el que la modelo salió desnuda en una foto, etc.  
Al bajar el nivel de la política al ciudadano común, utilizando la moda, se aumenta la posibilidad de tener una democracia estable. Esto porque “con la media-política, los ciudadanos se han infantilizado, ya no se comprometen en la vida pública y son alienados y manipulados a través de artilugios e imágenes; la democracia se ha desnaturalizado y pervertido”. (Lipovetsky, 226)
Se puede concluir que Lipovetsky lo que quiere mostrar en su libro es una relación fuerte entre la moda, los medios, y la búsqueda del placer, en una estabilidad de la democracia y la sociedad.  El se basa en hechos históricos de la cultura occidental para dar a entender como el surgimiento del culto a lo nuevo y la muerte de la veneración al pasado, causaron que el disfrute de las cosas simples aumentara. Muestra también como la puesta en tierra o democratización al acceso de la mayoría de cosas banales, que antes solo disfrutaban las personas de la punta de la pirámide social, hizo que comenzara el proceso de personalización o individualización de todas las cosas. Todos los seres humanos quieren ser diferentes del otro.
Por otra parte, el deseo, el individualismo y la seducción hacen que la gente sea más manejable, por ende los medios de comunicación se aprovechan de esto para mantener la calma y garantizar que la democracia funcione.

Bibliografía


Biografías y Vida. Biografía de Gilles Lipovetsky. 2004. http://www.biografiasyvidas.com/biografia/l/lipovetsky.htm (último acceso: 12 de Mayo de 2010).
Lipovetsky, Gilles. El imperio de lo efímero:La moda y su destino en las sociedades modernas. Barcelona: Anagrama S.A., 2007.